Barbarita en Ceilán
sábado, 19 de junio de 2010 by el paseante
De pequeño coleccionaba sellos. Para hacerlo, hay que ser meticuloso.
Los arrancaba de postales antiguas en la granja de los caballos a base de vapor de agua. Luego los sumergía en un plato sopero, para despegar la goma y los restos de papel del dorso. El rey Alfonso XIII me miraba ahogándose muchas décadas después de que guiara aquellas cartas de amor de los bisabuelos, escritas con letra menuda y cuidada. Finalmente, los secaba boca abajo sobre papel de periódico y los prensaba en la enciclopedia Salvat.
Con ellos comencé la colección. Luego desvalijé las cómodas de todas las tías maternas (cinco) en busca de cartas, postales, paquetes certificados... con mi disfraz de ratón. Pero apenas reuní un centenar de ejemplares en esas tardes de expolio. La mayoría eran piezas de caza menor: el Caudillo retocado con Photoshop para parecer más joven en esos sellos de tonos pastel.
Barbarita fue la verdadera impulsora de la colección. Era la amiga americana de mis padres. La conocieron en su viaje de boda, en esa España de los años sesenta. Sus vidas se cruzaron en un hotel de Barcelona, a la salida de un ascensor. Luego volvieron a tropezar sus pasos en un hotel de Sevilla, a la salida de un ascensor, casualmente, como en una novela de Paul Auster. Si te sucede eso, es inevitable reírte y hacerte amigo para siempre, aunque ella viviera en San Antonio (Texas) y ellos en la tierra de la niebla. Se cartearon durante mucho tiempo, con esos sellos preciosos de aviadores yanquis en los sobres vía aérea que el cartero depositaba bajo la puerta de madera. Arrancaba sus estampillas a base de vapor de agua para sumergirlas en un plato hondo, mientras los hermanos Wright (pioneros de la aviación) me miraban ahogándose en ese pequeño Atlántico sopero. En las cartas siempre había fotografías polaroid de ella y sus nietos frente a una casa de madera. Todos tenían los dientes perfectos y blancos en esas sonrisas que a los norteamericanos les surgen espontáneas, mientras que nosotros debemos decir "patata".
Yo ya había nacido, y ya coleccionaba sellos, cuando una mañana de verano Barbarita llamó al timbre de la granja de los caballos. Venía de vacaciones. La recuerdo vestida muy diferente a nosotros, con su elegancia norteamericana y su cabello corto y cuidado. Alta, educada (se parecía tremendamente a la mujer noble). Tras despeinarme, me entregó un sobre de papel marrón, repleto de sellos de todos los países que había visitado desde que su marido murió siendo todavía joven.
Mientras permaneció en la tierra de la niebla, mientras conocía nuestros rincones, mientras disfrutaba de nuestro cuidado en un país con una dictadura militar, yo limpiaba y prensaba miles de sellos de cien lugares distintos que me costaba situar en un mapa, entusiasmado con aquel regalo. Los más bonitos eran de un sitio que me parecía el más fantástico del planeta, con aromas de especias y tigres en las selvas. Con cuentos de Salgari. Se llamaba Ceilán. Barbarita me habló de él en el patio con hortensias, sentado en el suelo con mi pantalón corto, cerca de sus piernas.
Ella murió en San Antonio (Texas) pocos años después. Yo me hice mayor. Mi colección de sellos reposa olvidada desde hace tiempo en un cajón de la granja de los caballos, con todos esos secretos.
No volví a pensar en Ceilán, ni en Barbarita, hasta que el sargento Hayden me regaló un CD en 2006 de una cantante llamada MIA. Ella es de esa isla. Me pareció extravagante una rapera ceilandesa. Pero me gustó que su música me hiciera recuperar la ilusión de vivir.
Me levanté durante meses, casi cada mañana, con el tema "Sunshowers". Recuperé las imágenes perdidas del aroma de las especias, de los tigres en las selvas, de las historias de Salgari. De Barbarita llamando al timbre de la granja de los caballos, trayéndome ese sobre con miles de sellos de todos esos sitios que ella había pisado. De esa mujer norteamericana junto a las hortensias del patio, con su cabello corto, con su elegancia distinta a la nuestra.
Escuchaba a diario esa canción que me cargaba de energía cuando comencé a escribir este blog y compraba una baguette en la panadería de la calle Torrijos, cuando regateaba el precio de la verdura en ese mercado municipal que parece un sombrerito inglés de media copa, cuando me entretenía en enamorarme de la muchacha triste de la librería de la calle Verdi. Esa etapa fue feliz en mi vida.
Hacía tiempo que no escuchaba el CD de MIA. Que no pensaba en Barbarita, en Ceilán, o en la primera etapa de mi blog, cuando era feliz y creo que lo sabía transmitir. He recuperado esa música hace poco poniendo orden en mis estanterías. La vuelvo a escuchar flojito mientras me ducho, para no molestar a nadie, y me doy prisa en quitarme el jabón de las orejas porque me gustan sus canciones. El tema "Sunshowers" me ofrece de nuevo energía extra para comenzar el día, como en 2006. También he vuelto a comprar en la panadería de la calle Torrijos. Luego desciendo hasta el mercado municipal, con su techo que parece un sombrerito inglés de media copa, para regatear el precio de las verduras en ese puesto que ya es barato.
De regreso a casa, pienso historias para contar aquí o en otras partes, mientras la muchacha triste sigue sin mirarme tras el escaparate de su librería. Antes de subir al piso, adquiero un sello cada día en el estanco para esa colección que comencé hace tiempo y que reposa en algún cajón de la tierra de la niebla. Como Barbarita reposa en algún lugar de mi memoria, rodeada de hortensias, imaginada en Ceilán.
PD: Disculpeu. Darrerament no us he pogut llegir. Ho aniré fent.
Començo pel títol, m'agrada. Sembla la protagonista d'una novel·leta d'aquestes que llegia quan era menuda: Barbarita en Ceilán, Barbarita va de compras...
És bonica aquesta història. Amb els seus segells i amb una mica d'imaginació segur que voltaves amb ella pel món.
Jo tinc una tia que viu al Canadà. Feia el mateix, enviava cartes a ma iaia i ens posava segells diferents que nosaltres posavem amb aigua. Un dia les cartes van deixar d'arribar, però perquè ma iaia ja va morir i amb ella, les cartes vingudes del Canadà.
Jo crec que no sóc tant meticulosa com tu, deixava restes de paper al darrera dels segells igual com deixo sabó de rentar plats quan els netejo :$
Bon dia, Paseante. Aixeca't d'horeta i ves a comprar la baguette.
Aquesta història és entranyable i m'ha recordat la meva pròpia col·lecció de segells, no tan escrupulosa (perquè jo simplement retallava el segell amb el paper del sobre al darrera) d'aquell temps en que no es feia servir el correu electrònic i les llargues i esperades cartes eren el motor que et feien viure. Vaig tenir els segells guardats en una capsa molt de temps esperant aquella vida de conte que sols podia estar dins la meva imaginació: aferraria els segells a una maleta que utilitzaria per viatjar arreu del món, o bé els posaria en una taula per prendre el cafè al jardí de les hortènsies o a la sala de lectura i es veurien sota un vidre, però finalment els vaig enmarcar i els tinc a l'estudi, ben controlats, com els somnis. M'ha encantat aquesta història!
Diguem típic i tòpic, amic Paseante, però mai no he col•leccionat altra cosa que cromos de futbolistes: Irazusta, Nieves, Leal, Kortabaria, Breitner, Luis Pereira, etc. Esperava tenir el meu propi cromo, òbviament lluint la samarreta del Barça, però quan el talent és mandrós t’acabes trobant un futur sense cromo propi.
El mercat de la Abaceria, tot i que una mica massa atrotinat darrerament, és una delícia amb petites sorpreses al seu entorn. Una cafeteria íntegrament descoberta, per exemple, anomenada Desdejunis Parera (Puigmartí/Verge dels Desamparats) que és on vaig conèixer la meva dona entre te amb llimona (ella) i cafè amb gel (el menda lerenda).
De M.I.A. m’agrada una de molt hipnòtica anomenada “Paper planes” però desconeixia que fos nascuda a Ceilan. Sempre he associat aquest país, per culpa d’un anunci de la tele, amb fulls de te de gran qualitat.
Potser el aromes de Ceilan, del te que la meva dona es prenia a Desdejunis Parera, van ser els que em van hipnotitzar.
Potser el aromes de Ceilan, del te que la meva dona es prenia a Desdejunis Parera, van acabar fent que l’únic “cromo” que porti ara a la cartera sigui una foto de la meva dona i el nen.
Els hi hauré de demanar que es posin per la foto la samarreta del Barça. Diguem típic i tòpic, amic Paseante.
El meu avi guardava segells, com el meu pare i el meu germà - de fet crec que una petita col.lecció encara deu rondar per casa del meu germà, suposo. No se perquè, però els segells, les monedes, els cromos en general, eren cosa d'homes. Al menys a casa.
No recordo la mare col.leccionant absolutament res, i a mi sempre em deien "a esta niña le falta constancia". També alló altre "esta niña es muy sentida". I també alló de "esta niña habla como un carretero, dónde lo habrá aprendido".
Ara em vindrien de fàbula una música en modo "repeat" (diferent del fito) i un forn per comprar-me baguettes. O similar. La fornera de sota de casa és una bruixa i fa mesos que em nego a entrar a la seva botiga. I al Lidl no fan més que promocions de futbol. Estic perduda a la vida, ja veus. No vull ni pensar què seria de mi sense els teus relats. Un petó, paseante.
Barbarita... Bon nom per a la teva nina inflable...
PS
No em disculpis. De casualitat t'he pogut llegir. No ho faré més.
Per què serà que qui més qui menys col·lecciona o ha col·leccionat alguna cosa?
Lo dels segells era més cosa del meu pare. Jo no ho vaig continuar. Jo el que feia era col·leccionar cigarretes. Totes diferents...fins que el meu germà se les va anar fumant de mica en mica :o$
Després ja no he seguit cap colecció seriosament però ajudo als que sé que ho fan i regalo baldufes, recullo sobres de sucre...
Si m'arriba alguna carta d'un país exòtic et guardaré el segell :o)
Una abraçada
PS: paraula de pas : nauti
Guardate bien tu colección de sellos pues no sabes el valor que tienes, ya ves lo que piden por las colecciones antiguas en Todocoleccion.com.
Me has dado una idea con ello para mi espacio ya que yo tengo mi historia de ello.
Un abrazo
Coincideixo amb la Xurri, la col·lecció de segells a casa era cosa del meu germà.
Només recordo una col·lecció, de capsetes, i ja de més grandeta, però vaig acabar farta de treure pols i me'n vaig anar desfent.
Paseante, gràcies! I gràcies per aquests escrits tan macos, tan ben escrits, tan sentits que només fan que t'admiri cada dia més.
Petonet!
Emily, és que es deia Barbarita (em sap greu no recordar el cognom). I els segells s'han de netejar bé, igual que els plats :-)
Vida, doncs molt mal fet. Els segells s'han de cuidar. Però m'agrada que els tinguis enmarcats al teu estudi.
Òscar, mira que sóc futbolero, però mai he fet coles de cromos de jugadors. No vas servir per al Barça (de vegades aquestes coses depenen de l'atzar) però ara ets un crack a Blogville. Buscaré aquesta cafeteria a l'entorn del mercat. Gràcies per aquest comentari tan tendre i per despullar-te una miqueta a casa meva. Ho trobo d'amic.
Xurri, només fem col.leccions els mediocres. La resta us dediqueu a crear. Fa poquet, la Rita em va mostrar una fleca amb uns pans que feien goig de veritat. Clar que s'ha d'anar a la Barceloneta. No és a sota casa teva. I no estàs perduda a la vida. Pregunta a la primera persona que passi pel carrer pel lloc on vols anar, i ella t'indicarà.
Veí, o et disculpes o et quedes sense el final de la meva part de les HV. Tú mil.lmo.
Fra Miquel, ara et faré la brometa fàcil. Col.leciono bitllets de 500 euros. No m'ho he pogut estalviar. Mola que el teu germà es fumés els teus cigarrets. No t'està malament com a creuat anti-fumadors :-)
Mari-Pi-R, mi colección no creo que valga mucho. Descubrí tu blog por casualidad. Gracias por entrar. Y espero que vayan bien los dos meses de vacaciones.
Rita, gràcies a tu. A mi també m'agrada el teu blog, però només et comento rucades :-( Sort demà amb la Princeseta. Aquests actes són bonics.
Segons què es col·leccioni es pot complicar seriosament l'existència...
http://picasaweb.google.com/senseespinanios/TINET2008?authkey=Gv1sRgCLCAsMD-_ZXTKw&feat=directlink#
No he servit mai per coleccionar res..Ep! per acumular si., però per coleccionar no...encara no he trobat un tema.
M'agrada molt aquest post Paseante .
I de l'Abacería m'agrada el senyor de la parada de dolços i vins del Liban.Sempre observant respectuós i fent una breu salutació amb la mirada quan passes pel seu devant i les parades de llibres de segona mà , on pots servir-te tu mateix deixant lliurement un euro a la guardiola i les safates de menjar japonés per emportar-te a casa.
I de fleques , la Fortino , home de deu , la de Travessera.
Maca la història de la Barbarita i tu, i aquests anars i venirs de la memòria.
A casa col·leccionàvem els segells de la xocolata Cemoi, encara els guardo en algun racó, tot i que no tenen història.
Els que sí en tenen i em van permetre fa uns anys iniciar un viatge llarg, llarg són uns segells mexicans preciosos i exòtics dels anys quaranta. De vegades encara viatjo.
N'hi ha de tot tipus.. Jo col·leccionava sobres de sucre...i la gent es quedava bocaoberta cada cop que els obria sense trencar el paper... La veritat, és que m'has fet pensar, que no sé on varen anar a parar tots aquells sobrets.... Sóc una mica desastrosa... !
Tengo olvidada mi colección de monedas :} Aun tienes alguna peseta? jejeje. El 2006 fue un año especial para mi también y todo primero de julio lo recuerdo. Empezamos el invierno aqui a los 28grados! que te parece?! jajaja
Um beijinho
Vaig llegir ràpidament el post i no el vaig comentar. Ara l'he rellegit perquè em va encantar.
T'imagino fent nedar els segells. El meu cosí gran també ho feia. Es quedava els que enviava la tieta Rita des d'Estats Units. I la meva tieta portava els que podia de la feina... No sé si el meu cosí està enganxant als seus fills. Tu podries buscar la col·lecció i fer que la segueixin els teus nebods. Què et sembla?
Jo col·leccionava clauers, i estan en una bossa no sé per on. El que guardo són totes les postals que rebo i en compro algunes. Estan en una capsa. Podria posar-les en àlbums
Abans s'esperaven cartes. Ara s'esperen posts. Espero posts! 3 dies ja són una eternitat!
Mai he fet col·lecció de sellos, però n'he tret uns quants pels germanets! A casa posàvem una olla d'aigua al foc i esperàvem que el vapor fes desenganxar la cola del segell. Era una feina de xinos! i de vegades et cremaves i tot! però eren moments entranyables. :). Com els teus contes!
El meu pare tenia una col·lecció de segell de "trajes regionales" que mai vaig entendre. Ell no tenia temps pe aquest tipus de coses però... a casa hi era.
En canvi, els meus germans i jo feiem les coles de cromos que donavem a la Danone: Heidi, per exemple. I també La Guerra de las Galaxias. Però mai las vam acabar, sempre hi havien un parell de cromos que no sortien... ves a saber per què.
I dues apreciacions: per cafè bó (ara, sense romanticismes) el del Caracas de Puigmartí. I per pa comdeumana, el del c/ Massens cantonada Providència. No hi ha color.
Petonets!!
Fra Miquel, l'existència es complica quan no pots anar a un link que et proposen. Catxis.
MK, noviets? Crec que els col.lecciones :-)
País, no conec aquesta xocolata. Deu ser de per allà a dalt. I conserva aquests segells mexicans que et permeten viatjar.
Eli, el que em preocupa és on va anar a parar tot aquell sucre. Catxis.
Thaisita, tengo pesetas. Las vienes a buscar? Te hecho de menos. Un beijinho.
Khalina, doncs no ho havia pensat. Igual m'espero un parell d'anys i passo la cole als nebots. El gran no la farà, però el petit potser sí. Gràcies per la idea.
Filadora, gràcies. Això del vapor era per desenganxar el segell de la carta, sense fer-la malbé. Però per netejar-los n'hi havia prou amb posar-los a l'aigua.
Rateta, jo els tinc els dels trajes regionales :-) I també feia coles de cromos de la Guerra de las Galaxias. M'apunto les teves recomanacions. Hi aniré.